DECLARATORIA DE LA
PRECUMBRE URBANA POPULAR.
BOGOTÁ, JUNIO 26 y 27 DE 2015.
En el camino que hemos recorrido las
comunidades, las organizaciones, los procesos populares y territoriales hacia
la Cumbre Popular Urbana, nos hemos reunido desde la diversidad, construyendo
confluencias y puntos en común por lo que este proceso es para nosotros, en sí
mismo, un gran avance, nos convocamos desde la solidaridad y el reconocimiento,
llegamos a la Pre cumbre desde los sueños comunes de transformación, libertad y
esperanza en que un mundo y una ciudad diferentes, son posibles.
Esta Pre-Cumbre Popular Urbana no es el
principio ni el final, es una fase del proceso que esperamos nos permita seguir
avanzando en una propuesta conjunta sobre el territorio, donde el encuentro de
la ciudad, lo urbano-rural y la región sea armónico, en donde la felicidad
valga más que la rentabilidad, la solidaridad más que la ambición y la libertad
más que la gobernabilidad. Aprendimos a ser por nosotros y en función de
nosotros, nos proponemos ser con otros y otras, superando las divisiones, la
fragmentación, que ha servido a los gobernantes para dominarnos y engañarnos.
Reivindicamos nuestro Derecho a la
Ciudad y al territorio porque reclamamos
esta ciudad como nuestra, la de los trabajadores, los y las jóvenes, las
mujeres, de todos y todas quienes habitamos los barrios populares, quienes
defendemos sus territorios, quienes la vivimos y la luchamos cada día. Contra
el neoliberalismo y el individualismo construyendo alternativas culturales,
sociales, organizativas, comunicacionales, ambientales de acción y movilización
por la ciudad que al mismo tiempo nos ha construido como sujetos sociales,
transformadores, sujetos y procesos de esperanza.
Reclamamos nuestro derecho a construir, habitar
y disfrutar nuestros territorios en lo que será la Carta por el Derecho a la
Ciudad y el territorio, porque desde ella seguiremos caminando todos y todas en
perspectiva de la construcción del poder popular y un nuevo modelo de ciudad y
región en todos los ámbitos que ello implica, pues la ciudad se ha constituido
como el principal centro poblacional, de producción y reproducción ideológica,
de expresión de la violencia, por ello es necesario entenderla también como un
escenario donde las organizaciones sociales tenemos que desatar nuestra fuerza
transformadora para y desde ellas aportar a un país en paz con justicia social.
La ciudad sigue creciendo en sus dinámicas
propias de forma desigual, entre otros factores por el conflicto social y
armado en Colombia, las lógicas de segregación, exclusión y fragmentación del
territorio a partir de los diversos intereses que confluyen en ella por lo que
se hace necesario propiciar la construcción de un espacio de encuentro y
convergencia de las organizaciones sociales de ciudad, a modo de Cumbre Urbana
donde se puedan pensar, soñar, unir, apuestas diversas de habitar y construir
ciudad alternativas a la imposición del modelo de ciudad y territorio actuales
desde el encuentro de experiencias de trabajo comunitario, popular, social, de
base, alternativo, político y académico, que permitan establecer lazos de
comunicación y planes de acción común en la construcción de un Gran Movimiento
Social y Popular de Bogotá y Cundinamarca.
En Pre
Cumbre Popular Urbana caminamos para
construir acuerdos mínimos para ganar
amigos y amigas, crear lazos de solidaridad y confianza para ir construyendo
entre todos y todas una propuesta de ciudad a partir de las agendas de las
diferentes experiencias organizadas y no organizadas. Escogimos para su
desarrollo el Hospital San Juan de Dios, porque este hospital es de todos, es
parte de nuestra historia y nuestras luchas, agradecemos la hospitalidad de sus
guardianes históricos, a los compañeros y compañeras de logística, de la comisión
metodológica y a cada uno de los que asistieron sin quienes este sueño no
hubiera sido real.
Estos dos días de diálogo se desarrollaron con base en
los pre encuentros locales, ganamos
experiencia en construir colectivamente
la metodología y alcances de este espacio. En un primer momento, se
realizó una presentación de cuatro procesos significativos de la ciudad
(Asamblea Sur, Mesa de Cerros Orientales, Coordinadora Cívico Popular de Ciudad
Bolívar, Encuentro Popular Sabana), posteriormente en mesas desarrollamos
ejercicios de memoria y reconocimiento de las luchas sociales que hemos dado en
los últimos veinte años en los territorios. El segundo día se realizó una
reflexión crítica sobre las últimas tres administraciones de Bogotá, discutimos
elementos para ir formulando una propuesta de modelo alternativo de ciudad y
acordamos una ruta de trabajo común para que los pasos hacia la cumbre tengan
la fuerza que necesitamos, la certeza que esperamos, el amor con el que
trabajamos y la esperanza con la que soñamos.
Luego de dialogar,
reconocernos, discutir y compartir hemos decidido asumirnos como compromisos
comunes:
Construir
y desarrollar una agenda mínima de acción hacia la Cumbre Popular Urbana en el mes de diciembre de 2015 que
consiste en:
1. Profundizar las discusiones y avances de la Pre Cumbre Popular Urbana en
los siguientes aspectos:
o Memoria de las luchas
urbanas de los últimos veinte años.
o Caracterización de los
conflictos presentes en el territorio e identificación de los puntos comunes de
trabajo.
o Reconocer los avances,
debilidades, vacíos y propuestas para desarrollar en los próximos añosa partir
del gobierno de Bogotá en los últimos doce años.
2. Construir una ruta colectiva que nos permita diseñar
alternativas desde los procesos territoriales en relación a un modelo
alternativo de ciudad y región que se materialice en una carta de la Ciudad de
Bogotá por el derecho a la ciudad.
3. Construir, movilizar e
impulsar:
o Planes de vida y Mandatos
Urbanos Populares para los territorios que garanticen la justicia social, la
vida digna y el buen vivir.
o Procesos de comunicación y formación popular
alternativos desde los territorios.
o Incidir con propuestas
construidas desde los territorios en los espacios y encuentros que discutan,
propongan y decidan planes y políticas sobre el territorio.
4. Construir agendas y acciones
territoriales con justicia social, incidiendo y tomando parte activa en las
decisiones que afecten nuestros territorios, procesos y comunidades.
El
camino hacia la Cumbre Popular Urbana debe permitir reconocernos, organizarnos,
pero ante todo consolidar un proceso de encuentro y convergencia de los
procesos territoriales, comprometidos en la transformación de nuestro territorio
de luchas, sueños y esperanzas.
Distintas luchas y formas organizativas
para construir alternativas en los territorios han sido y son nuestros
compromisos por el cambio de modelo. La lucha por el ambiente, los servicios
públicos, la educación, el trabajo digno, la soberanía alimentaria, la economía
popular, la defensa del territorio, entre otras más, son nuestras consignas en
perspectiva del buen vivir para todas y todos. Nos invitamos a no desanimarnos, a superar los problemas que seguramente
se presentarán, que tratarán de dividirnos, de desprestigiarnos; pero la dignidad
y el bienestar que nos merecemos hace que valga la pena este esfuerzo y muchos
más.
Decimos
no a la militarización de la vida, no a la privatización de los servicios
públicos ni del transporte, no a la paramilitarización del estado ni de los barrios,
no a la privatización de la salud ni la educación, no a la estigmatización de
los jóvenes, no al patriarcalismo, no a la privatización del agua, no a la
precarización laboral, no a la pérdida soberanía alimentaria, no a la
gentrificación, no a la destrucción de los páramos, ríos ni humedales, no a la
destrucción de los cerros, no a la minería; gritamos si a la vida, a la
libertad, a la dignidad y el reconocimiento de todas las comunidades y al buen vivir en nuestros territorios,
seguiremos caminando por la utopía, por la esperanza y la paz con justicia
social de cada día, porque la paz son cambios.
Compartimos
y acogemos como consignas de la Cumbre Popular Urbana las siguientes:
“NINGUNA
DECISIÓN SOBRE NOSOTROS SIN NOSOTROS”.
“NO
SE TRATA DE UN PARTIDO NUEVO, NI DE UN MOVIMIENTO NUEVO, SE TRATA DE UNA NUEVA FORMA DE ORGANIZACIÓN
DE LOS NO ORGANIZADOS”.
“EL PODER POPULAR EMANA DEL PUEBLO MISMO”